La Pasión experimentada por Jesús es la prueba más grande que Él nos da como demostración de su infinito Amor por cada uno de nosotros. Con extraordinarios milagros demostró que es el Hijo de Dios. El Viernes Santo nos presenta el sufrimiento Jesús y luego crucificado en la cruz, pero después de dos días resucita y muestra que es el Señor del Universo.
El Viernes Santo Jesús se entregó a sus enemigos porque tenía que hacerse. Podría desempolvarlos a todos o apedrearlos para bloquearlos y ni siquiera hacer que se acerquen a Él o podría hacer cualquier acto para borrarlos.
Jesús siendo Dios lo permitió todo, y fue el espíritu satánico el que poseía a los enemigos del Señor.
El amor movió a Jesús para redimir a la humanidad y en la justicia perfecta de Dios, la muerte en la Cruz fue la victoria sobre la muerte y la enfermedad.
Contemplando la Cruz encontramos todas las respuestas a cada pregunta. Jesús clavado en la Cruz es la imagen más inquietante que podemos imaginar, pero es la señal de su victoria sobre los demonios, muerte, enfermedad, pecado.
Dios se hizo a sí mismo un hombre para sufrir en la naturaleza humana y para demostrarle a todos que el sufrimiento y la muerte ya no se consideran castigos o desgracias, en realidad son experiencias redentoras, y la mejor prueba viene de Jesús, quien los enfrenta y los supera. Su muerte en la Cruz es la mayor prueba del Amor que Dios tiene para cada uno de nosotros, el quiso probar todo lo que experimentamos menos el pecado.
Jesús muere en la Cruz y asume el sufrimiento y la muerte, haciéndolos «buenos» porque todo lo que ha hecho es bueno.
El sufrimiento con Jesús se convierte en un instrumento de salvación y en nosotros repara los pecados. Por su muerte en la cruz, la vida y la salvación son quitadas.
Jesús muere en la Cruz pero no quita el sufrimiento y la muerte física, los hizo salvar vidas, insignia de mérito para la vida eterna.
Aquellos que no aceptan el sufrimiento no ganan ninguna ventaja espiritual, mientras que quienes lo aceptan pacientemente descubren el renacimiento espiritual, porque el sufrimiento es fuente de mérito. Ciertamente el sufrimiento no es agradable, solo juntos con Jesús aguantamos y nos ofrecemos a El.
La rebelión contra el sufrimiento indica falta de docilidad, tolerancia e ignorancia de Jesús. Él nunca envía sufrimiento, Dios es Amor, y cuando pedimos ayuda en oración, Él transforma cada sufrimiento en agradecimiento espiritual e incluso físico con sanaciones.
Jesús muere en la cruz por todas estas razones compartibles, pero nosotros no podemos ser los que den una opinión de oportunidad, ya que Dios así lo decidió y es lo que es bueno y justo. Con su cruel Pasión, el Señor nos entiende perfectamente haber vivido cruelmente a través del sufrimiento escalofriante, y para mostrarnos cuánto nos ama asumió los pecados de los hombres.
La muerte, si se considera como descomposición y degradación del cuerpo, es consecuencia directa del pecado. Lo opuesto a la muerte es la vida, dar amor, el amor que todo lo transforma en bien. La muerte no es un bien en sí misma pero con la muerte en la Cruz de Jesús se vuelve redentora, la gente buena la cruza para recibir en el Cielo las recompensas que merecían en esta vida. Ellos recibirán gloria eterna, mientras que los enemigos de Jesús, tortura y condenación eterna.
Dios se hace hombre para demostrar su infinito amor a nosotros, Él Todopoderoso, Eterno, Inmortal, demuestra que todos somos su verdadera preocupación.
Jesús aparece hoy derrotado por los incrédulos, cuántos no han experimentado su amor. Afirman que Jesús predicó la vida y la salvación, la eliminación de la muerte y el mal pero siempre gana en el mundo. Para los que se ven cegados por el orgullo y la arrogancia así es pero la verdad es diferente.
LAS BUENAS PERSONAS QUE ADORAN A JESÚS TARDE O TARDE SIEMPRE RECIBIRÁN JUSTICIA DEL SEÑOR PORQUE ES IMPOSIBLE PARA EL TRIUNFO ABSOLUTO DEL MAL.
Jesús venció la muerte y el dolor, nosotros también podemos vencerlo si nos mantenemos unidos a él, con él y con él. Cada uno de nosotros está llamado a vencer el pecado para quedarse con Jesús, debemos adorarle sobre todas las cosas y saldremos victoriosos como él!
No libera al hombre del pecado sin la voluntad del hombre, debe ser el hombre quien desea la victoria, luchando contra el pecado en el caminar espiritual emprendido.
La lucha contra el pecado es también la prueba de que quieres vivir con Él, para seguir sus enseñanzas aparentemente estrictas, pero están llenas del Amor manifestado en la Cruz. Usa Misericordia ilimitada con nosotros. Hoy comenzamos la Novena a la Divina Misericordia pedida por Jesús a Santa Faustina Kowalska.
Entendemos tanto como sea posible que Jesús tomó el pecado del mundo para hacernos hijos del Padre y cristianos capaces de vencer a los demonios si nos unimos a su voluntad. Si vivimos en su voluntad. Y completa el pecado cuando el pecador se arrepiente y se vuelve a su misericordia.
Jesús quiere salvar a todos, Él es Amor que siempre perdona a los pecadores arrepentidos y es Misericordia hacia la humanidad pero tiene que volver a Él. Él pide a todos que actúen con valentía para no perder el Cielo eterno.
El Cuerpo de Jesús muere por unas horas para luego recuperar la gloriosa vida, pero como Dios siempre vive y nos ama sin límites, casi nos suplica que dejemos toda forma de maldad y empecemos una nueva vida junto a El, Señor victorioso del mal.
Hoy, además de meditar en la Pasión de Jesús, leemos Mateo capítulo 24.
1 Ave María para el Padre misterios de nuestra Fe Fray Alberto dela Santísima Trinidad +++ FRAY ALBERTO DELA SANTÍSIMA TRINIDAD ORACION A NUESTRA MADRE SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA.
Son siete Gracias que la Virgen Maria concede a las almas que la honren diariamente, considerando sus lágrimas y dolores con siete Avemarías.
GRACIAS: “ Pondré paz en sus familias. Serán iluminados en los Divinos Misterios. Los consolaré en sus penas y acompañaré en sus trabajos. Les daré cuanto me pidan, con tal que no se oponga a la voluntad adorable de mi Divino Hijo y a la salvación de sus almas. Los defenderé en los combates espirituales con el enemigo infernal, y protegeré en todos los instantes de su vida. Les asistiré visiblemente en el momento de su muerte. Verán el rostro de su Madre. Los que propaguen esta devoción sean trasladados de esta vida terrenal a la felicidad eterna directamente, pues serán borrados todos sus pecados y mi Hijo y Yo seremos su eterna consolación y alegría.”
1º DOLOR. LA PROFECÍA DE SIMEON:
Madre nuestra Santísima, por el dolor que tuviste al escuchar la profecía de Simeón, y porque viviste con el temor de Madre de aquella hora, ten compasión de nosotros y haz que escuchemos siempre la voz de Dios en nuestras almas y no la desoigamos jamás. Avemaría.
2º DOLOR. LA HUIDA A EGIPTO:
Madre Santísima, por el dolor que tuviste al huir a Egipto, viviendo en el destierro y la extrema pobreza ten compasión de nosotros y haz que huyamos de todo pecado. Avemaría.
3º DOLOR. EL NIÑO PERDIDO:
Madre Santísima por el dolor que tuviste cuando se perdió el Divino Niño Jesús, ten compasión de nosotros y no permitas que perdamos la amistad de Dios cometiendo voluntariamente un pecado mortal. Avemaría.
4º DOLOR. EL ENCUENTRO DE MARIA CON CRISTO EN EL CAMINO DEL CALVARIO:
Madre nuestra Santísima, por el tremendo dolor que padeciste en la Calle de la Amargura, viendo a tu Hijo destrozado por los azotes y las espinas, el rostro mas bello cubierto de sangre, ten compasión de nosotros y haz que encontremos a Jesús propicio en la hora de nuestra muerte. Avemaría.
5º DOLOR. LA CRUCIFIXIÓN Y MUERTE DE JESÚS :
Madre nuestra Santísima, por la espada que atravesó tu Inmaculado Corazón cuando tu Hijo inocente y puro fue desnudado y crucificado, ten compasión de nosotros y haz que podamos crucificar nuestros vicios y apetitos desordenados. Avemaría.
6º DOLOR. JESÚS ES DESCENDIDO DE LA CRUZ Y DESCANSA EN EL REGAZO DE SU MADRE:
Madre nuestra Santísima, por la pena que sentiste al recibir el cadáver de Jesús en tu regazo y examinar sus Santas Llagas, ten compasión de nosotros pecadores con quien El sufrió tanto y haz que lo recibamos cada día con mayor amor en la Sagrada Comunión. Avemaría.
7º DOLOR. LA SOLEDAD DE LA VIRGEN MARIA DESPUÉS DE DEJAR EL SEPULCRO:
Madre nuestra Santísima, por el dolor que tuviste al depositar apresuradamente el cuerpo inerte de Jesús en el sepulcro, dejándolo en la oscuridad y en el silencio, ten compasión de nosotros Madre de Misericordia y no nos abandones en la hora de nuestra muerte. Avemaría.
ORACIÓN:
Madre Santísima, por tus lágrimas vertidas con tanto dolor al pie de la Cruz, ten piedad de nosotros y alcánzanos un vivo dolor de nuestros pecados, la gracia de morir en brazos de tu Hijo Jesús y la gloria con El en el Paraíso.
Amen Amen Amen Fray Alberto dela Santísima Trinidad Fray Alberto dela Santísima Trinidad Jesús, antes de dar inicio a su pasión, va con su Madre a pedirle su bendición. En este acto Jesús nos enseña la obediencia, no solamente exterior, sino especialmente la interior, que se necesita para corresponder a las inspiraciones de la gracia. Muchas veces nosotros no estamos dispuestos a darle cumplimiento a las inspiraciones de la gracia, ya sea porque nuestro amor propio, junto con la tentación, nos lo impide, o también por respeto humano, o bien, porque no nos hacemos dulce violencia a nosotros mismos.
Pero rechazar una buena inspiración para ejercitar una virtud, para hacer un acto heroico, para hacer una buena obra, para practicar una devoción…, hace que el Señor se retire, privándonos de nuevas inspiraciones. En cambio, correspondiendo prontamente con piedad y con prudencia a las santas inspiraciones, atraeremos sobre nosotros mayores gracias y luces.
En los casos de duda, se echa mano de inmediato y con recta intención, del gran medio de la oración y de un recto y sabio consejo. De este modo el buen Dios no deja de iluminar nuestra alma para poder seguir las divinas inspiraciones y hacer que se multipliquen aprovechándolas al máximo.
Debemos hacer todas nuestras acciones, nuestros actos, nuestras oraciones, las Horas de la Pasión, con las mismas intenciones de Jesús, en su Voluntad, y sacrificándonos a nosotros mismos como él lo hizo, para gloria del Padre y por el bien de las almas.
Debemos estar dispuestos a sacrificarlo todo por amor de nuestro amable Jesús, uniformándonos a su espíritu, obrando con sus mismos sentimientos y abandonándonos a él, no solamente en todos nuestros sufrimientos y contrariedades externas, sino más aún en todo lo que disponga y suceda en nuestro interior; de este modo, cuando la ocasión lo quiera, nos encontraremos dispuestos a aceptar cualquier pena. Haciendo así le daremos a Jesús pequeños sorbos de dulzura; pero si además hacemos todo esto en la Voluntad de Dios, que contiene todas las dulzuras y todas las alegrías en modo inmenso, le daremos entonces a Jesús grandes sorbos de dulzura, de modo tal que podremos mitigar el envenenamiento que le provocan las criaturas y consolar su Corazón Divino.
Antes de empezar a hacer cualquier cosa, pidamos siempre la bendición de Dios, para hacer que todas nuestras acciones tengan el toque de la divinidad y atraigan sobre nosotros y sobre todas las criaturas las bendiciones del cielo.
« Jesús mío, que tu bendición me preceda, me acompañe y me siga, para que todo lo que haga lleve el sello de tu bendición ». Fray Alberto dela Santísima Trinidad Fray Alberto dela Santísima Trinidad Por los niños obligados a crecer prematuramente, vendidos y esclavizados. OREMOS PADRE ESCÚCHANOS.
Por las mujeres maltratadas, que sufren marginación y violencia. OREMOS PADRE ESCÚCHANOS.
Por los ancianos que no son queridos, que sienten soledad y rechazo. OREMOS PADRE ESCÚCHANOS.
Por los parados, que no encuentran la posibilidad de realizarse. OREMOS PADRE ESCÚCHANOS.
Por los inmigrantes, obligados a dejar tierra, casa y familia, y que no encuentran buena acogida. OREMOS PADRE ESCÚCHANOS.
Por todos los enfermos, marcados por el dolor, la deficiencia, la minusvalía, la depresión, por todos los que sufren en su cuerpo o en su alma. OREMOS PADRE ESCÚCHANOS.
Te pedimos la paz para nuestro mundo; que cesen las guerras y el terrorismo; que todos los conflictos puedan solucionarse con el diálogo. Bendícenos, Señor, con tu PAZ. OREMOS PADRE ESCÚCHANOS.
Por la Comunidad Cristiana de nuestra Parroquia, para que seamos fieles a nuestra misión profética, invitando a los hombres y mujeres de nuestro entorno a vivir los valores salvadores del Evangelio. OREMOS PADRE ESCÚCHANOS. FRAY ALBERTO DELA SANTÍSIMA TRINIDAD